El vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) y presidente de la Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios (COPAL), Daniel Funes de Rioja, rechazó la posibilidad de que el sector fabril otorgue un incremento del 30 por ciento en la próximas paritarias y se mostró partidario de un acuerdo anual.
Ese porcentaje "está muy lejos de lo que se debería estimar como inflación para 2016 y no lo veo, con carácter general, que pueda ser un número ideal", remarcó.
El vicepresidente de la UIA recordó que "el Gobierno estimó entre un 20 y un 25 por ciento" la inflación para este año y destacó que "el sector privado necesita que haya estabilidad macroeconómica para crecer y eso sólo se logra con índices decrecientes de inflación".
Tras señalar que la industria "tuvo un achatamiento de la actividad y una recesión de cuatro años", el dirigente fabril expresó que en las paritarias del sector privado, que se producirán "entre marzo y junio", tienen que tener un "esfuerzo común entre trabajadores y empresarios y buscar soluciones alternativas, que las hay".
Respecto de su sector, el titular de COPAL expresó a rasdio El Mundo que "tenemos problemas de productividad y de ausentismo serios y eso también va a tener que estar en la mesa" a la hora de discutir paritarias.
Por otra parte, y al ser consultado sobre si el aumento de las tarifas de luz que comenzó a regir desde ayer se trasladaría a los precios, Funes de Rioja comentó que "los equipos técnicos" tanto de la UIA como de la COPAL, "están descifrando el impacto" que tendrá en cada sector.
"En el sector industrial hay cautela", indicó el dirigente, quien señaló que como una de las prioridades para el sector alimenticio la de "mantener el consumo" interno, aunque aclaró que las empresas de alimentos "exportan entre el 40 y el 60 por ciento de su producción".
En lo que hace a los salarios, Funes de Rioja puntualizó que "en el sector privado industrial, los salarios evolucionaron (en los últimos años) por encima de cualquier índice" y consideró como más "lógica que haya una discusión (paritaria) que cubra el año aniversario" y no que se divida en dos, como sugirieron algunos gremios.