Andrés D'Alessandro selló el esperado regreso a River después de trece años y confió que vuelve a su "casa" con "hambre" para "hacer una nueva historia" en el club que lo vio nacer como jugador y "salir campeón".
martes 18 de noviembre de 2025
Andrés D'Alessandro selló el esperado regreso a River después de trece años y confió que vuelve a su "casa" con "hambre" para "hacer una nueva historia" en el club que lo vio nacer como jugador y "salir campeón".
"Estoy contento de volver a mi casa. Llego a un equipo ganador y es un orgullo ser parte del River de hoy. Llego como uno más para sumar, esa es la idea", dijo D'Alessandro en sus primeras palabras como flamante refuerzo "millonario".
Su salida de Inter de Porto Alegre fue intempestiva y la llegada a River inesperada hasta hace unos pocos días. Pasaron trece años para que el enganche vuelva a ponerse la camiseta de la banda roja.
Con el presidente del club Rodolfo D'Onofrio y con el entrenador Marcelo Gallardo como laderos, D'Alessandro se sentó ante los periodistas y las cámaras en la sala de conferencias del Monumental, apenas dos horas después de haber llegado a Buenos Aires desde Porto Alegre y firmar el contrato que lo liga al club hasta diciembre.
"Estoy con hambre, con ganas, quiero ser campeón", repitió D'Alessandro con una alegría indisimulable, y contó que ganar "un torneo internacional con el club es una cuenta pendiente".
Tenía apenas 22 años cuando dejó Núñez, habiendo festejado tres títulos locales pero con deuda de levantar una copa internacional.
Jugó en Alemania (Wolfsburgo), en Inglaterra (Portsmouth), pasó por Zaragoza, regresó un año al país para vestir la camiseta de San Lorenzo y después más de siete en Inter, mientras su regreso a River parecía cada vez más lejano.
"Muchas veces se usó políticamente mi nombre", enfatizó en más de una oportunidad el mediocampista para explicar las razones por las que tardó tantos años en regresar, y enseguida agregó que su vuelta "se dio cuando tenía que ser, en un momento en el que estoy bien, jugando".
Contó que "lo que propone River adentro de la cancha" lo movilizó y le "generó muchas cosas, y las charla con él (por Gallardo) hizo que cerrara todo. Todavía no caigo, estoy muy feliz por mis viejos, mis amigos, mi familia".
Remarcó D'Alessandro que "es un desafío muy grande" volver al club e intentar "demostrar" que está "vigente" y que puede "darle cosas" al equipo.
Mañana entrenará por primera vez junto a sus nuevos compañeros en el predio del club en Ezeiza, después de haber jugado 80 minutos en la consagración de Inter en la Recopa Gaucha, por lo que los hinchas de River deberán esperar al menos dos semanas para verlo pisar el césped del Monumental.
Pese a su pasado como capitán antes de emigrar a Europa y a la referencia en la que se convertirá apenas ingrese al vestuario, D'Alessandro repitió en más de una oportunidad que llega "como uno más" a un "equipo armado".
Tanto es así que adelantó que no le pedirá la emblemática camiseta 10 que actualmente usa Gonzalo Martínez. "Que sea cualquiera. La 98, 97, 96, o la 35, por los años que voy a cumplir. Lo importante es ponerme la camiseta de River", enfatizó.